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Hace 4 años empezó esto llamado Futbolverdadero, pocos meses después me llegó un mensaje de alguien que me explicaba que el futbol de su pueblo había vuelto tras unas temporadas en las que había desaparecido.
Esa persona era el entrenador del equipo y quería que se supiera que el club que iba a entrenar y de su pueblo había vuelto. Esa persona era nada más y nada menos que Miguel Ángel Chamorro.
Por entonces el club Sport La Garrovilla había vuelto a competir. Y me hizo llegar un escrito en el que me mostraba el club y desde entonces no he podido dejar de seguirlo.
Empezaron en el campo de tierra, en la segunda regional extremeña. Poco a poco empezaron a competir y no tardaron mucho en lograr grandes cosas.
En estos 4 años ha habido muchos partidos, mucho esfuerzo, mucho tiempo dedicado por todas partes del club para ir cumpliendo objetivos. Muchas alegrías y unas cuantas penas, pero todas con el mismo fin.
Llevar el escudo del equipo a lo más alto y de la mejor manera, haciendo disfrutar a todo el que le sigue y ellos mismos. No hay otra palabra que defina a este club «Familia».
En dos temporadas pasaron a jugar en la primera regional extremeña, siendo campeones de liga. Un objetivo marcado y que consiguieron a base de esfuerzo y dedicación, con una pandemia que no les paro, por medio.
Esa pandemia que nos trajo de cabeza, que nos dejó a todos en casa y que a pesar de todo fuimos poco a poco saliendo de ella. Mientras nuestros guerreros luchaban por su club y por su pueblo.
Tras el merecido ascenso, llegó la primera regional, donde no sería nada fácil. El competir con equipos a priori superiores, un juego marcado, disputado y complicado, pero nadie dijo que esto fuera fácil…
Además, gracias al trabajo de la directiva con su presidenta a la cabeza, María José , la cual sin ella esto no hubiera sido posible, el pueblo de la Garrovilla vio como su campo de arena se convirtió en uno de césped artificial, mejorando así sus instalaciones.
Y llegamos a esta última temporada, tras el sufrimiento de la anterior, donde nos jugamos el play-off de descenso y que pudimos salvarnos gracias al gran trabajo de nuestros jugadores.
Se presentaba una nueva temporada, nuevas ilusiones, nuevas caras en la plantilla. Había que mejorar la anterior temporada. Y según pasaban los partidos, el equipo se veía bien, fuerte y con mucho ánimo.
Los de Chamorro y CIA iban salvando obstáculos, consiguiendo victoria tras victoria, no sin dificultad. Fue partido ha partido luchando, peleando, sufriendo y divirtiéndose.
El objetivo cada vez se veía más cercano. Y es que cuando todo el mundo rema en la misma dirección, con la misma ilusión y ganas, las cosas llegan. Así ha llegado este nuevo título para La Garrovilla, saliendo campeón de liga otra vez.
Y es que la unión de afición y equipo era un puntal base para la consecución de los objetivos. Y se han visto recompensados. Un club humilde, con trabajo, esfuerzo y dedicación, ha conseguido levantar a la gente del pueblo y hacerles partícipes de este gran logro.
Ahora toca disfrutar, terminar el trabajo que se ha hecho durante todo este tiempo. Porque el futbol volvió para quedarse en La Garrovilla. ¡Enhorabuena, campeones, enhorabuena a todos los que formamos la familia de La Garrovilla!!!
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