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Hablamos con un técnico malagueño, que tras su fugaz paso por el futbol base, empezó su andadura por los banquillos senior de su comunidad , para dar el paso a Madrid y su experiencia por el extranjero.
Llego a estar como analista en Ucrania, Segundo entrenador en Marruecos y Arabia de la mano de otro técnico que pudimos charlar con el. Os dejamos a Sebastián que nos cuenta su trabajo y experiencia.
¿Cuándo empezó Sebastián su trayectoria por los banquillos?
Bueno, empiezo por fuerza mayor por enfermedad. Y es que de pequeño siempre jugué al fútbol y tenía el fútbol en las venas, pero siempre tuve claro que por mi mala formación en el fútbol base de aquellos tiempos nunca llegaría a ser futbolista, que era mi pasión; entonces me enfoque en los estudios para otra profesión, la cual también me apasionaba, y ya me dedicaba desde muy joven al mundo de la alta montaña y mi trabajo era investigar y guiar por la montaña a grupos de personas.
De ahí viene seguramente mi liderazgo y fuerza mental. Tras una enfermedad me obligaron a dejar la alta montaña y necesitaba un nuevo objetivo en mi vida. Empecé a estudiar el título de monitor de fútbol para ver si sentía mariposas en el estómago o seguía buscando.
Y realmente tenía vocación y motivación así que me lancé a estudiar Nivel I antes de ejercer. Tras nivel I y sentirme preparado di el paso al Banquillo.
¿Cómo has vivido tu trabajo dentro del fútbol base?
También es curioso, porque he pasado por el fútbol base de puntillas, es más, mi primera experiencia en un banquillo ya es en un equipo sénior y tiene su explicación, soy una persona muy competitiva, con mucha exigencia y priorizo la intensidad en el entrenamiento por encima de todo, entonces tenía claro que con esos valores no debía entrenar en el fútbol Base, no quería dañar a ningún jugador en sus inicios.
Con el tiempo he entrenado a Cadetes, juveniles masculinos o alevín e infantil femeninos, por ejemplo en Madrid, dónde salieron campeonas siendo un club de barrio en Alcorcón, esto lo hacía por necesidad económica, yo entrenaba a equipo Sénior para darme a conocer pero no me llegaba ni para el alquiler, por lo que cogía fútbol base, eso sí, cambiaba el rol y me venía bien quitar esa careta de competitivo y distraerme y pasarlo bien, tratando de adaptarme a las necesidades de cada una de las edades que entrenaba, empezaba entrenando a las 16:00 y terminaba con mi equipo sénior a las 12:00 de la noche.
¿Cómo ves el trabajo de esta etapa por donde has podido entrenar?
En España está totalmente desarrollado el fútbol base, por supuesto hay mucho que mejorar, pero en lo general hay un gran futuro. En otros países como Marruecos, tratan de copiar el modelo Europeo pero en la base siguen teniendo más dificultades y los entrenamientos son aún rudimentarios… Pasa lo mismo en Arabia Saudí o Egipto, el fútbol base está más dejado.
¿Que es para Sebastián lo más importante de trabajar en esta etapa?
Dentro del fútbol formativo hay muchas etapas y cada una de ellas reclama unos parámetros. Pero creo que nos equivocamos si alejamos al jugador del balón y lo acercamos a la táctica, ya gracias a Dios se desprendió la lacra que trabajaba físicamente a los jóvenes a edad temprana, pero el resultado ha llevado a sesiones más tácticas, movimientos sin balón etc… Hasta en categorías de fútbol 7.
En edades tempranas tienen que experimentar, explotar individualmente y una vez sean jugadores técnicos, capaces de dominar el balón ya se tendrá tiempo para encosetarlos a una posición específica y trabajar tácticamente.
¿Qué clubs desarrollaste tu trabajo en la etapa base?
Cuando realice las prácticas del curso de monitor antes de empezar mi trayectoria como entrenador, ayudé en CD El Palo y ya después como complemento a mis equipos sénior en Madrid en CDE Amistad Alcorcón, Pozuelo y Unión Leganés. También entrené a los porteros jóvenes de AD Union Carrascal en Madrid
¿Cómo fue el cambio de entrenar dentro del fútbol senior?
No tuve cambió, más bien empecé por sénior y usé el fútbol base para olvidarme de la presión diaria de resultados y la competitividad, fue una vía de escape para mi mente.
¿Por qué clubs has desarrollado tu carrera dentro del senior?
A pesar de ser aún «joven», he tenido la suerte de estar en muchos clubs.
En Málaga en los inicios: Libertad Torreño y Vélez CF «B».
Después llegó mi etapa en Madrid en CDE Amistad y Atlético Club de Socios.
De Madrid llegó mi oportunidad en fútbol profesional en Marruecos, en el Chabab Rif Hoceima en Botola 2 (segunda División) como segundo entrenador.
Tras el Covid entrene a un Histórico de España, Écija Balompié SAD, luego pase por Qum FC en Toledo y Almagro FC en Ciudad Real, entre medios fui adjunto de Dirección Deportiva en AOVE Villacarrillo y analista táctico para Carlos Inarejos en Karpaty de Ucrania.
Por último en Al Arabi SC de la Primera División en Arabia Saudí, como segundo entrenador.
¿Cómo fue tu experiencia en Arabia?
Satisfactoria en lo profesional y a nivel experiencia aunque a su vez un poco decepcionado por cómo se acabó de forma inesperada y dolorosa… Cuándo te cesan por malos resultados es entendible, pero en esta ocasión, con plantilla nueva, club recién ascendido, solo dos jugadores repiten de la temporada pasada, realizas un gran trabajo, 4° en las primeras 7 jornadas y único equipo invicto hasta entonces…
Aún no entendemos qué pasó para que nos cambiarán por un cuerpo técnico Tunecino. Es un tren que pasa pocas veces, nosotros nos subimos y lo estabamos aprovechando pero nos tiraron del tren en marcha.
¿Cuál es la metodología con la que trabajas en tus equipos?
Soy un entrenador muy exigente y que trabajó en el día a día a la máxima exigencia, a veces en exceso, por la intensidad y pasión con la que vivo el fútbol, como metodología siempre digo que soy un mix, trato de adaptarme a la plantilla, ciudad, costumbres, terreno de juego.
Eso sí, siempre enfocado al entrenamiento Global, lo más similar a un partido real, si meto posesiones siempre le doy una dirección e incluso posiciones específicas de los jugadores. Y para que se cumplan los objetivos de las tareas uso reglas de provocación para que suceda con más frecuencia aquello que busco, hasta llegar al juego real sin normas para ver cuantas veces se da lo que se ha entrenado.
También dependiendo del tiempo que tenga y los medios, como el staff que disponga. Me gusta hacer entrenamientos específicos en grupos reduciendo, tanto en defensa como en ataque.
¿Qué es lo más importante para Sebastián dentro de un vestuario?
Que sea un buen grupo, que tengan compromiso y estén unidos fuera del campo, porque pienso que eso se refleja dentro del terreno de juego. Prefiero 20 jugadores de nivel medio pero que estén a gusto los unos con los otros a tener 10 jugadores de alto nivel pero que el vestuario sea silencioso, aburrido y con mal ambiente.
¿Qué nos puedes decir de la figura del segundo entrenador?
Es fundamental, primero tiene que ser el apoyo psicológico del primer entrenador y después en el trabajo técnico debe saber tener un punto medio y si hay que discutir o tienes que decir algo que no ves bien hacerlo, sin pensar en las consecuencias.
En esta última experiencia en Arabia he tenido que aprender a ser segundo entrenador, ya que en Marruecos tuve otro rol. En este caso he trabajado con un entrenador profesional con una gran trayectoria y pasar de ser el líder y mandar, a ser el segundo y un peón más me ha costado pero ha sido muy gratificante.
¿Qué es lo más gratificante de ser entrenador?
Diría que las amistades que me llevo con los jugadores a posteriori y como no, la victoria… Ya que cada vez es más difícil de conseguir, la victoria significa que eso que has trabajado durante la semana sale tal y como pensabas, eso es muy gratificante.
¿Qué es para Sebastián el Futbolverdadero?
Es una locura, algo que mueve demasiados sentimientos. Que no hay nada igual como el fútbol, sea en la calle, en la pobreza, en la riqueza y en cualquier lugar del planeta, lo compruebo cada vez que viajo, hoy me encuentro en Irlanda y hay en cada rincón un campo de fútbol de césped natural, parques solo con porterías es y los seguidores del fútbol en Irlanda sienten lo mismo que siento yo por el balón y eso es fantástico. En este deporte cantar un gol, hacer una entrada desde el suelo, hacer un remate de cabeza o una parada decisiva es emoción y sentimiento.
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