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Hoy hablamos con un técnico riojano que tras su paso como futbolista semiprofesional llego a los banquillos del futbol base y también por el futbol senior.
Y es que mientras era jugador ya le entro el gusanillo de pasarse al otro lado. Tras entrenador en diferentes equipos vizcaínos, volvió a su tierra natal y allí siguió su gran carrera en los banquillos del futbol base y senior. Conozcamos a Parri.
¿Cómo empezó Parri en el mundo del futbol?
De pequeño siempre seguí a mi padre, jugó muchos años en el River Ebro y Arnedo, él originó todo. Mis comienzos como jugador son el fútbol de calle, con mis amigos entre la jornada de mañana y tarde al medio día jugábamos y al salir de clase también.
Preparábamos partidos en las pistas rojas del colegio y ahí pasamos nuestra infancia y la primera toma de contacto con el fútbol.
Muchas horas y muchos amigos, quizás los mejores momentos que tengo recuerdo de pequeño.
¿Cómo fue tus inicios en los banquillos?
Jugando en el Lemona tuve contacto con el entrenador del juvenil y me despertó la inquietud de ver el punto de vista del entrenador, en la temporada siguiente fiché por el Gernika y comencé entrenando un equipo de fútbol 7 Alevín, sigo teniendo contacto con aquellos chicos les estoy muy agradecido por cómo me hicieron disfrutar del primer año y sentir ganas de profundizar en este mundo.
¿Qué clubs has podido trabajar durante tu etapa de entrenador?
Como he comentado anteriormente inicié viendo entrenamientos y compartiendo momentos en el Lemona para de ahí pasar a ejercer en Gernika durante 4 años, 10 años en el River Ebro con experiencias en todas las etapas incluida juvenil nacional y 3ª división en varias etapas, en la Unión Deportiva Logroñés como responsable de metodología y entrenador en Segunda Federación y ayudante en Tercera Federación actualmente.
¿Qué es para Parri lo más importante de la formación?
Lo más importante en la formación es el jugador, no creo en planificaciones generales, ni en tareas iguales para cada etapa, los jugadores tienen su identidad y su desarrollo y necesitan de una planificación individualizada.
Ver lo que emerge del juego en cada jugador me parece una parte vital para su mejora.
¿Crees que se le da la importancia suficiente al futbol base?
Bueno creo que todos somos conscientes de que si no hay fútbol base no puede haber jugadores con nivel adecuado para el fútbol profesional, otra cosa es los recursos que invierten los clubes en cantera, ahí ya el debate sería más profundo.
¿Cada vez los clubs hacen más hincapié en incorporar una metodología en su base?
Es que es importantísimo, al entrenador no se le puede dejar solo, tenemos que acompañarlo, ayudarle, marcarle lo que queremos de los jugadores y como queremos hacerlo.
De esta manera creamos una identidad y una forma de trabajo que se mejora cada día, eso repercute en dos cosas vitales que son la razón de ser de la metodología: mejorar al entrenador y mejorar al jugador.
Pregunta difícil ¿Entrenador o Formador?
Es una pregunta fácil.
Quieres una persona que genere tareas y organice el día a día para el fin de semana intentar ganar, contrata un entrenador.
Quieres una persona que quiera mejorar al individuo, que priorice las necesidades de los jugadores para progresar a la competición, contrata un formador.
A mí me van los segundos, pero yo no tengo la verdad absoluta, en mi club actual lo tienen claro tanto Gerencia como Dirección de Cantera es por ello que para mí es una respuesta fácil.
¿Qué es lo que diferencia tu trabajo?
Bueno para diferenciar un trabajo de otro necesito tener información de cómo trabajan los demás y soy muy respetuoso en este aspecto.
No sé si es diferencia o no por lo que te comento, pero un aspecto que priorizo en mi trabajo son los objetivos individuales a los colectivos.
¿Cómo fue tu cambio de entrenar en la base a senior?
El futbol senior es mucho más competitivo, está muy ligado a los resultados y eso cambia mucho las cosas, la forma de trabajo, la visión diaria y semanal, … Intento mantener esa esencia de mejora individual y el equilibrio de las características y detalles que requieren los partidos y la competición.
No es fácil adaptarse a la diferencia de contexto que es la base y el fútbol senior, a mí me cuesta en ciertos aspectos esa adaptación.
¿Cómo está siendo esta temporada?
La temporada en el equipo en el que soy miembro del cuerpo técnico está siendo bastante ilusionante, el proceso de los jugadores está siendo muy bueno y todos están teniendo su espacio para poder desarrollarse, tenemos nuestras dificultades, pero bueno como todos, esos momentos nos hacen crecer.
Venimos de una temporada muy mala y me enseñó a relativizar todo mucho más que antes, sí que en líneas generales contento, pero viendo lo que esconden los resultados buenos que estamos teniendo, porque a veces esconden carencias que no vemos y en ese aspecto tenemos que estar muy atentos esta temporada.
A nivel de metodología estamos dando pasos firmes en nuestra idea de trabajo, el modelo de juego se va afianzando, la visión del club y de los entrenadores es la misma. Este año hemos progresado en el trabajo por líneas y posiciones, sembrando la base para desde ahí trasladarlo a otras temporadas.
Nos falta tiempo y espacio para compartir más cosas a nivel deportivo con todos los cuerpos técnicos, el día a día a veces nos absorbe ahí debemos mejorar, pero somos conscientes y cada temporada es un pasito más para este club tan joven.
La calidad humana y deportiva de los entrenadores y preparadores físicos de este club junto con sus ganas de crecer hacen que el balance sea positivo, es difícil encontrar personas que crean en lo que les dices y se lo trasladen a los jugadores incluso mejor que uno mismo.
¿Qué es para Parri el Futbolverdadero?
El fútbol engloba todo; el profesional, el de los niños, el de las pachangas de los amigos, el del bar y sus debates, las charlas de los partidos y entrenos, la familia y amigos juntos en un estadio o delante de la televisión, padre e hijo entrenando en la calle, los amigos con dos chaquetas que simulan los palos de la portería, el entrenador delante del ordenador organizando tareas, las conversaciones del encargado de metodología con los entrenadores, la sensación de victoria, la de derrota … Es algo tan grande que no se puede describir sino sentir.
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